martes, 4 de diciembre de 2012

Homo musicum - Fernando Andrés Puga


Intrigado por silbos que anochecen
se irguió sobre sus pies
y vertical fue en busca de los trinos que anidan en las hojas

Se agitaron las ramas
Y volaron gorjeos
Y los labios del mono imitaron el canto

Y fue hombre

Entre tanta delicia bailó con las estrellas

2 comentarios:

Nicolás Cavern dijo...

Breve y descriptivo. Sera por eso que admiro a los poetas.Yo soy de la peregrina idea que un mono se sento en un cardo y hubo de erguirse, este le señalo a otros el problema y todos los monos del lugar optaron por imitarlo.
Un abrazo!

fernando andrés puga dijo...

Tu teoría es más que interesante. Probablemente se acerque más a lo que realmente sucedió.