...y llevas el caño a tu sien, apretando bien las muelas
y cierras los ojos y ves, todo el mar en primavera (Viernes 3 AM)
a Puny Atman
I
Entre adioses perpetuos y pasajeros
vamos creciendo,
perdemos /ganamos
transcurrimos
como el tiempo.
Todo muere
dicen/repiten
las mujeres ancianas mirando al piso,
aunque sus relojes biológicos
giren lentos en la última vuelta
Pero yo
nada sé de muerte
Llevo todo adentro
como si me moraran,
en ese extraño mundo, desconocido para mi,
ese espacio oscuro
desde donde no sé llegarme…
II
Ayer,
o hace siglos,
me despedí de un niño que se fue
por mano propia,
de un niño que abrazaba sueños
de poeta.
Aquel,
el de los ojos negros
con la mirada triste de los pájaros.
Aquel,
que reía dentro las rosas,
y besaba cada pétalo
hasta deshojarse.
III
¿Quién puede escuchar entre tanto ruido?
Si cerrara sus ojos, quizás,
pudiera ver el mar en primavera,
si sólo cerrara sus ojos…
Hoy sé
que algunos se van para siempre,
y otros, simplemente,
se quedan.
Tomado del blog http://www.laperladejanis.blogspot.com/
3 comentarios:
Bellamente duro y triste.
Nanim, tan triste que todavía duele...
Impecable.
Triste, por cierto.
Un placer leerte. Gracias
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