Yo no maté a nadie
¿A nadie?
Pensátelo bien
¿Acaso una parte de vos no sucumbió frente al embate de tu puñal cobarde?
Ese yo que tenías por bandera,
puro en su fe,
audaz en sus batallas,
incólume ante golpes, fierrazos, insultos, desamparos
Ese yo que creías ser tú mismo
¿no cayó por barrancas de disculpas?
¿de falacias que encubren la mentira de rodar por el fango?
¿Que no mataste a nadie?
Sabrás vos
Yo sí
Dejé flotando en el pantano
el etéreo cadáver de aquel niño
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