lunes, 30 de agosto de 2010

Y Armando se nos fue el último - Martín Maggi

Primero quiso Pocho

fugarse, disgregarse

de su hemiplejia.

Luego Teresa y la tía piba

tan seguidas,

tan enseguida

de nuestra partida,

y tantos mas que ni recuerdo.

Julio con su locura

empedernida

tan sublime y llena

de espacios en la niebla;

etéreo y volátil

siempre lejos.

Ni que hablar de Caballero

el vecino policía del acuario,

de monedas y quebrantos,

tan solitario, padre, abuelo, relicario.

Y Armando con su cigarro

pulmonero

se fue consumiendo

así, añejo

se lo llevó el viento

o alguna sudestada

en pleno invierno...

y se nos fue el último

tan lejos.



Nota: A Armando y todos los demás

Domingo - Macky Corbalán

El vecindario vocinglero
ha ido declinando
con el color del día,
las hojas secas, en desordenada
carrera, se han aquietado
al margen de las calles despobladas;
aquí, algo
le sugiere al alma
que no debiera ser la desolación
el lenguaje universal,
ni el tiempo un escondite
del que nadie ha venido a librarnos.


Con autorización de la autora: http://pasajeradearena.blogspot.com/

Antes del final - Aldo Novelli

Estoy solo.

Quiero escribir todas las páginas del mundo
leer la cifra secreta oculta en el agua primordial
cantar el canto nuevo de la nueva humanidad/
cantar sin tiempo un canto de lluvia y empaparme la cara
y la sangre de agua fresca/ del agua clara que baja de la cima.

Y me pregunto: ¿por eso estoy aquí?
en medio del desierto rodeado de gente que no conozco.
¿Conozco esta gente? ¿me rodea y me habla a mí? ¿a quiénes hablan?.

Quiero decir estos poemas con la voz de un pájaro y el zarpazo de un tigre.
¿Qué son estos poemas? ¿qué es eso que llaman poesía?
Clasificar el mundo y sus objetos
y ponerle número a cada cosa es la religión de los tiempos.
Una legión de fanáticos caminan detrás de los objetos.

El arte es el opio de los pueblos dicen los nuevos pastores
¿existe el arte? ¿el pueblo?
¿dónde están los pastores de este inmenso rebaño de ovejas?.

¿Por qué estoy aquí? ¿porqué aquí y no allá?
allá donde el sol broncea el cuerpo de felinas mujeres
o más allá/ donde el hombre inventa distintas muertes cada día/ todos los días.

Estoy solo/ busco amor.
Quiero ser el amado.
¿Me alcanzará?
¿Me alcanza esta soledad para escribir el poema total?/
ese aleph/ ese inalcanzable.
¿O el amor y el deseo de una dulce obrera del mercado
es el fin de todas mis utopías?
naranjas papas y manzanas en sus manos sucias y sus jugos en mi cuerpo
y sus ojos admirando mi palabra/ mis sombras/ mis castillos de humo.

¿Para qué nacer amar desamar y morir?. ¿para qué Dios de los vencidos?
dime Dios ¿para qué?

Quiero ser el amado/ el bienamado/ el más amado.
¿Y el paraíso terrenal/ la revolución/ la súper hembra/ el gran polvo?
y buscarte en lo alto/ más alto que los fatuos cielos

¿dónde estás padre?.

¿Y los hombres/ la libertad/ los ideales supremos/ la loca utopía...?.
¿Qué hago acá en este punto infinitesimal del cosmos
intentando trascender con palabras demasiado gastadas?

¿Y los hijos? ¿y esta sangre que me sucede como revolución ansiada?

Hombre que inventa religiones/ mecanismos/ discursos/ fantasmagorías
¿porqué y para qué el poema? ¿dónde la poesía?
¿ese arco tensado entre dos estrellas ilusorias?
¿dónde la flecha que atraviesa esta eternidad de instantes?

la poesía: esa oscuridad/ luz/ pensamiento/ genio encerrado en una botella/ todo y nada.

¿Detendrá mi palabra algún día la bala del suicida o el asesino?
¿es necesario el poema/ el poeta/ el inventado/ para detener esa bala?
¿justificará ese instante el poema?
¿la miseria del mundo/ el hambre/ la muerte sin sentido?.

Estoy solo/ sin padres/ sin hijos/ sin amada en medio de la noche cósmica.

Estoy temblando.
Voy a morir.

¡Pero antes voy a salvarme!.

¡Antes escribiré el poema que frenará la bala
de la infinita tristeza del hombre!. //

Usurpadores - Nanim Rekacz

Qué fácil es para la muerte,
con tantos sicarios,
con tantos hambreadores,
con tanto vendedor de misiles...
Qué fácil es para la muerte,
con tanta corrupta impunidad,
con tanta mugre en el agua, en la tierra, en el aire...
Qué fácil es para la muerte, hoy,
descansar al sol...
mientras tantos humanos hacen su tarea
y sonríen mostrando sus dientes calaveras...

miércoles, 25 de agosto de 2010

acerca de las cosas - Héctor Ranea

la paloma me enerva
con su levedad de
paloma
,
de pluma
,
de pincel del aire
.

lo indivisible el aire el perfume el espíritu
canto
:
una materia llevan dentro
que las hace cosas graves terrestres poco leves hundibles
.

¿el resto
?
el resto es poca cosa
:
el vacío el espacio los cantos del último ruiseñor de Mahler
las lágrimas que entibian lúbricamente los labios de una mujer
;
esa mujer
,
el hombre que se conjetura a su lado
,
el tiempo que llevan allí
como en un sueño
.

acerca de las cosas


de: Profundo Corazón de la Marea, Ediciones Último Reino (2000)

precordialgia - Antonio J. Cruz

Ese agudo dolor que te acuchilla

desde lo más profundo de tu pecho.

La certeza cotidiana

de una vida casi ya sin esperanza.

No poder evadir la obscenidad del rito,

el estrés, la rutina,

la oficina

y las ansias de no salir nunca

de casa.

Pelearte contra el mundo,

intentar llegar al viernes

para soñar que algo descansas

y después, el lunes,

mientras consumes tu tiempo

entre papeles, algún café

y mucha incertidumbre

y por supuesto tu dosis de ansiolítico,

pensar en la parca,

en todo lo sucio que te envuelve

mientras te repites en silencio

“Este maldito dolor dentro del pecho”.



Poema de: “POESÍA COTIDIANA” (2006)

Soborno - Aazam Abidov

Es entendible
Aceptar un soborno o darlo
En los negocios  o en la vida social.

Sin embargo,
La gente me mata con un cuchillo
Que no tiene filo.
Toman y dan sobornos
Para ir a la Meca por  purificación

Cornudo peregrinaje!

Traducción del uzbeko: Andrea Cote

Rayo - Antonio J. Cruz

Relámpago.

Algo desgarra lo oscuro.

El delirio
es la clave.

Destello en busca
del asombro.

Salvador green - Aldo Novelli

a Pere Bessò
Desde hoy voy a darle un sentido a mi vida/
dejaré de beber como un desahuciado
de fumar como un escritor solitario
y de fornicar como un animal en celo.

Voy a cambiar radicalmente mi vida.
Ya basta de orgías desenfrenadas con mujeres sin fe
de apostar a la muerte en cada golpe de dados
de beberme el alba en alcoholes baratos
entre borrachos y poetas fantasiosos.
Me quitaré de la cabeza la idea de que el progreso fue un fracaso
de que el mundo es un deshecho de esta ambición sin fin
y que la llamada especie humana/ ha desaparecido definitivamente.
Dejaré de escribir papeles inútiles que nadie lee
intentando ganarme no se que cielo prometido/
el cielo está contaminado de misiles nucleares
y los ángeles murieron carcomidos por la radiación.
Ya no buscaré flores en el desierto
para dárselas a ellas como ofrenda de amor.

Voy a darle un vuelco a mi vida.
Me afiliaré a los buenos de Green Peace
formaré una fundación con artistas y deportistas
preocupados por los animales/
y me dedicaré enteramente a salvar al peludo patagónico
de las garras de los charanguistas.
Si bien aún no es una especie en extinción
pero si seguimos así/ pronto lo será
el folklore los exterminara dentro de poco tiempo/
hasta usarán al quirquincho bola para jugar al fútbol playero.
¡No quiero ver ese día!

Seguirán muriendo de hambre niños en Bangladesh/ Tucumán o Etiopía
continuarán muriendo mujeres y hombres del tercer mundo
de enfermedades curables en el primer mundo/
pero sepan ustedes una cosa
cuando desaparezcan los últimos sobrevivientes
el peludo patagónico estará vivito y coleando
y será gracias a mí
el salvador green de la patagonia.

lunes, 23 de agosto de 2010

poemas seguidos de (4) - Héctor Ranea

miente el sonido que atrás haya música
en los vaivenes del péndulo no hay tiempo
en el flujo del río nada transcurre
que no haya transcurrido

y si alguien ríe
y si alguien llora
y si alguien muere
y si alguien nace

tampoco hay más que esa repetida obsesión
de llamar tiempo al lapso que se nos entierra
entre nuestro devenir y el momento


de: poemas seguidos de (2004)

Todavía danzan en mi mente - Antonio J. Cruz

IX
Todavía danzan en mi mente
las miradas descalzas
y el callado murmullo
de los algarrobales.

La tierra
latía de tristeza.

Aquella tarde
nuestro adiós era una pena
con las alas al viento


Poema de: “ASHPA SÚMAJ” (2003)

La otra mitad - Javier López

Podría morir intentando comprenderte
llegar hasta la luna buscando una respuesta
atravesar el orbe detrás de explicaciones
que me hagan soportar mejor la vida que quedó
cuando te fuiste y me dejaste a medias


Tomado de Resueno

La oscuridad - Antonio Cruz

La oscuridad
no está en lo confuso
que me envuelve
sino en la pérfida sospecha
de que no me recuerdas.


Poemas de “DESDE EL EXILIO HACIA HIROSHIMA” (2006)

lluvia - Héctor Ranea

en la lluvia cae escrita
una vela inconsistente
frágiles palabras incoherentes y débiles
estrellas lentas líquidas lúcidas
en medio de las llamaradas de los rayos

en los segundos entre las hojas de los árboles
en las centellas desde los cálices de flores magulladas
en la vasta superficie de todas las gotas en descenso
hasta cantar su definitivo ruido
se oye apenas un silbido de canciones soñadas

lluvia en mi noche en mi vereda en la ventana
que me une desde hilos invisibles
al lado que no sé de los mensajes hilvanados

que moja una sustancia en la sustracción de los cuerpos
drena el lodo de las esperas inútiles
ampara bajo murallas de sonido
las palabras todavía impronunciables



de "ala en caída"

jueves, 19 de agosto de 2010

Yo siento ardor en mí - Aazam Abidov

He pasado un día, uno más,
y el tiempo encumbra ya el futuro
Ya sea que ganara o perdiera,
En mi vida siempre fui ambicioso.

Dónde están ahora el ardor y la luz?
Qué ha resultado de este hueso blando?
La vida me muestra, al final
Que lo que es uno es un VALIOSO saber

Deja de atarme!, antigua vida
Yo siento ardor en vez de corazón,
Ya el tiempo no me engaña
Y mi vida jamás la cortaré.



Traducción del uzbeko: Andrea Cote

Hay un ave - Aazam Abidov

Me dijeron que soy un ave
que se ajusta a todas las estaciones,
para conocerme a mí mismo
no podría nunca
volar alrededor de las alas que tendré

Sin embargo, no cantes por mí
No me elogies, no lo compongas
Hay un ave que si la liberas
Vuela de nuevo a su jaula.

No digas nunca que soy como esa ave.


Traducción del uzbeko: Andrea Cote

Cerca y Lejos - Aazam Abidov

El pavor está cerca de mí
Cerca de mi alma.
Como tengo temor de él
Huyo
Me escapo
Y estoy lejos de la agudeza.

Sólo una cosa:
Cuando le temo
Me pongo más cerca
Con mi eterno pavor.


Traducción del uzbeko: Andrea Cote

martes, 17 de agosto de 2010

Muchacha que atraviesa una puerta - Antonio J. Cruz

Merodeaba
por el paisaje desolado y triste
de mi propio desierto.
Esa vana comarca
donde la sed del alma no se aplaca,
porque el quid de mi sustancia
se deshace en recuerdos
sin mañana.

Desde mi soledad escarnecida
el desvarío generando el espejismo.

Ojos, piel, cabello...
que es lo mismo que gritar arrebatado
transparencia,
levedad,
hebras castañas.
Sueños paridos
por sueños más antiguos.
Fantasía que invade el territorio
de tenebrosas noches desveladas.

Me animaré.
Habré de inaugurar la travesía
hacia un cosmos un poco más sereno,
porque ayer,
cuando tu paso sensual y sugestivo
atravesaba la puerta con donaire,
el pasado se volvió cenizas
y pude recordar que estaba vivo.


Poema de: “POESÍA COTIDIANA” (2006)

poemas seguidos de (2) - Héctor Ranea

caen las aguas
caen los biseles de los vidrios
caen lágrimas desvergonzadas

mares que caen en vasos de vino
horizontes que caen sobre lluvias perennes
maniquíes que caen vestidos con periódicos

abrazos partidos por la caída
llantos aflojados por el estrépito
inmundicias que caen de la televisión
cae todo
cae el pez hasta el medio del agua
cae la mano que te vengará
cae la vela de tu velorio
la misma visera del poeta cae

mientras
,
llueve


de: poemas seguidos de (2004)

Requiem de madre - María Elena Walsh

Aquí yace una pobre mujer
que se murió de cansada.
En su vida no pudo tener
jamás las manos cruzadas.

De este valle de trapo y jabón
me voy como he venido,
sin más suerte que la obligación,
más pago que el olvido.

Aleluya, me mudo a un hogar
donde nada se vuelve a ensuciar.

Nadie me pedirá de comer
en mi última morada
no tendré que planchar ni coser
como condenada.

Cantan ángeles alrededor
de la eterna fregona
y le cambian el repasador
por una corona.

No lloréis a esta pobre mujer
porque se encamina
a un hogar donde no hay que barrer,
donde no hay cocina.

Aleluya esta pobre mujer
bienaventurada,
ya no tiene más nada que hacer
y ya no hace nada.

Noche - Aazam Abidov

Gracias. El ruido ha cesado. Sólo silencio.
La luna se ha quedado detrás de la casa
La pena se ha cansado en el salvaje
El lloroso es tal vez afortunado.

Todo alrededor de la puerta adormilada,
La desnuda paciencia debe regar
la tierra sin fin ―que aunque pequeña―
está cuidada por un aterrado guardián.

Traducción del uzbeko: Andrea Cote

Deshaced ese verso… - León Felipe

Deshaced ese verso,
Quitadle los caireles de la rima,
el metro, la cadencia
y hasta la idea misma.
Aventad las palabras,
y si después queda algo todavía,
eso
será la poesía.
La tangente
¿Y la tangente, señor Arcipreste?...
¿El radio de la esfera que se quiebra y se fuga?
¿La mula ciega de la noria, que un día, enloquecida, se liberta del estribillo rutinario?...
¿La correa cerrada de la honda, que se suelta de pronto para que salga la furia del guijarro?...
¿Esa línea de fuego tangencial que se escapa del círculo y luego se convierte en un disparo?
Porque el cielo... Señor Arcipreste, ¿sabe usted?,
No hay arriba ni abajo...
y la estrella del hombre
es la que ese disparo va buscando,
ese cohete místico o suicida, rebelde, escapado...
De la noria del Tiempo
como el dardo,
como el rayo,
como el salmo.
Dios hizo la bola y el reloj: la noria dando vueltas y vueltas sin cesar,
y el péndulo contándole las vueltas, monótono y exacto...
El juguete del niño, señor Arcipreste,
¡el maravilloso regalo!
Pero un día el niño se cansa del juguete y se le saca las tripas y el secreto
como a un caballito mecánico,
como a un caballito de serrín y de trapo.
Es cuando el niño inventa la tangente, Señor Arcipreste,
la puerta mística de los caballeros del milagro,
de los grandes aventureros de la luz,
de los divinos cruzados de la luz, de los poetas suicidas, de los enloquecidos y los santos
que se escapan en el viento en busca de Dios para decirle
que ya estamos cansados todos, terriblemente cansados
de la noria y del reloj,
del hipo violáceo del tirano,
de las barbas y las arrugas eternas,
de los inmóviles pecados,
de este empalagoso juguete del mundo,
de este monstruoso, sombrío y estúpido regalo,
de esta mecánica fatal, donde lo que ha sido es lo que será
y lo que ayer hicimos, lo que mañana hagamos.

domingo, 15 de agosto de 2010

El gato en España 6 - Rubén della Sera

La vida se les escapa entre
las dichas que la visitan a diario.
Sucumbe la enseñanza
que de niña le inculcaron,
y se descubre el agua del pozo,
creciendo de golpe,
ante la ignorancia del ojo que razona.
Ese claroscuro de los ojos en el recuerdo,
aquel fugaz amor vencedor
encendiéndose más y más
a la orilla del fuego,
del fuego opaco,
que le acaricia las entrañas.
Y aquí el gato. Y aquí ella.
Quebrados,
al influjo de un estúpido atavismo,
sin vida,
que se les escapa.

OnLine - Claudia Isabel Lonfat

A veces soy
un misterio sin audio
el flash suicida de la cámara
o la línea directa a tu cuore
Quizás,
entre tanto engranaje invisible,
confinados a este espacio
arrojados al mismo esqueleto; somos uno.
Uno
en la marea oscilante,
mientras la noche se escorza
y nos inventa este punto infinito
Uno
caminando sobre fragmentos
de lo que fuimos, apenas
un cuadro colorido inacabado,
un misterio sin audio
ardiendo entre hemisferios.


Tomado del blog http://www.laperladejanis.blogspot.com/

Noticias mínimas - Fernando Montalbano

La muerte, novia gris de los perversos,
firma autógrafos, conspicua ante su grey.
Yo sahumo la calle con mis versos;
tan apócrifos lo son, como su ley.

Una puta, un amor, una promesa,
una ética imposible, una verdad;
los derechos humanos, en la mesa.
Han servido a las víctimas. Piedad.

Ay, los tiempos que se vienen,
ay, los tiempos que se van.

Porque hay libros dentados que lastiman,
porque muerden las musas de Serrat.
Conectados a nada nos abisman,
y no pasan los mates por el chat.

Los enchufes vitales de uno mismo
no se adaptan al futuro de ocasión.
Ex alumnos del autoritarismo,
entendimos rock por revolución.

Ay, los tiempos que se vienen,
ay, los tiempos que se van.

Sin gambetas históricas de Diego,
con los trapos del alma bajo el sol
los fracasos que nos dejaron ciegos
en el arco del destino piden gol.

En la patria más íntima traduzco
con manuales inútiles, el mal.
En la esquina resisto y soy quien luzco
la poesía prendida en el ojal.

Ay, los tiempos que se vienen,
ay, los tiempos que se van.

Ausencia - Antonio Cruz

Descubrir que la noche
me mira con tus ojos.
Hundirme en la esperanza de que vengas
algún día
o preguntarme
por qué no te quise de otra forma
o por qué vos no me amaste
como yo necesitaba.
Percibir un latido apresurado
que navega en la noche
mientras arrastra en su viaje
esta nostalgia sin fin que me delata.
Recordar el señuelo
de esa oscura mirada que me asedia,
o alguna encrucijada de palabras
que habitaron nocturnos más profundos.
Sucumbir a la certidumbre de tu ausencia;
rendirme a la exactitud
de la distancia;
dejar salir el grito silencioso
que se eleva desde el costado más cobarde
del espíritu,
y entonces, libre,
preparar el corazón y el alma
para despertar mañana en la certeza
de que la vida, a pesar de nosotros,
continúa.


Poemas de “POESÍA COTIDIANA” (2006)

Tercer proyecto anómalo - Héctor Ranea

Caminamos por una vía imperfecta
en la que notamos los saltos
la despareja soledad
los horizontes tambaleando

Propongo alisar el camino
y que no haya rutas torcidas
que alguien tenga que enderezar
o sinuosas irregularidades en la dicción
que alguien venga a corregir
con un caos edilicio

En ese sentido cobra valor
el proyecto de generar una máquina
que nos acerque a los abismos
tanto como sea posible para lunáticos
y perdidos
para muertos y suicidas
para las ondas de choque
de la muerte insólita
como para la cotidiana muerte
que deberá ser
al final
abolida

Tomado de Proyectos Anómalos (2005)

viernes, 13 de agosto de 2010

Sueño en la oscuridad - Aazam Abidov

Estaba demasiado oscuro alrededor y en este sagrada oscuridad el Amor dio a luz un niño. La Madre Amor sabía que se trataba de mi Sueño. El sueño abrió sus ojos. Ojos demasiado negros en aquella oscuridad, y en tanto oscurecía comenzaba a encogerse el corazón del sueño. “Ven aquí” – Dijo el amor- tranquilo, dame tu mano y yo te llevaré a través de este dolor
Es una pena – estaba oscuro en todas partes-
En el cuarto
En el patio
En el corazón.
El Sueño suspiró y murió
El sueño partió a los espacios sin luz.

Subway 1 - José María Fonollosa

Piensan que debo hacerlo. Esperan todos
que la saque de casa con violencia.
No merece, lo creen, otro trato

Con conmiseración me miran unos.
Con burlona expresión o desprecio otros.
Sospechan que sé cuánto saben ellos,

Y lo sé. Ella se acuesta con cualquiera.
Y eso no puede permitírselo un hombre
que se precie de tal. Es lo que piensan.

Pero es normal y simple. La mujer
quiere a distintos hombres y a distintas
mujeres quiere el hombre. Es lo corriente

No importa que en un cuarto hallen cobijo
diferentes personas, siempre y cuando
yo lo precise esté desocupado

No puedo renunciar a la delicia
de tenerla en mi casa cada noche,
por complejos morales de otra gente

Familiares, amigos, conocidos…
Presionan insistentes, en silencio.
Lo mejor es mudarme hacia otro barrio.

Posibilidades - Wislawa Szymborska

Prefiero el cine.
Prefiero los gatos.
Prefiero los robles a orillas del río.
Prefiero Dickens a Dostoievski.
Prefiero que me guste la gente
a amar a la humanidad.
Prefiero tener en la mano hilo y aguja.
Prefiero no afirmar
que la razón es la culpable de todo.
Prefiero las excepciones.
Prefiero salir antes.
Con los médicos prefiero hablar de otra cosa.
Prefiero las viejas ilustraciones.
Prefiero lo ridículo de escribir poemas
a lo ridículo de no escribirlos.
En el amor prefiero los aniversarios
que se celebran todos los días.
Prefiero a los moralistas
que no me prometen nada.
Prefiero la bondad del sabio a la del demasiado crédulo.
Prefiero la tierra vestida de civil.
Prefiero los países conquistados a los conquistadores.
Prefiero tener reservas.
Prefiero el infierno del caos al infierno del orden.
Prefiero los cuentos de Grimm a las primeras planas del periódico.
Prefiero las hojas sin flores a la flor sin hojas.
Prefiero los perros con la cola sin cortar.
Prefiero los ojos claros porque los tengo oscuros.
Prefiero los cajones.
Prefiero muchas cosas que aquí no he mencionado
a muchas otras que tampoco he dicho.
Prefiero el cero solo
al que hace cola en una cifra.
Prefiero el tiempo de los insectos al tiempo de las estrellas.
Prefiero tocar madera.
Prefiero no preguntar cuánto me queda y cuándo.
Prefiero tomar en cuenta incluso la posibilidad
de que todo tiene una razón de ser.

lunes, 9 de agosto de 2010

Angel y demonio - Daniel Salzano

Soy el principito
en el asteroide de tu corazón.
Soy el Humphrey Bogart
que te roba un beso
al lado del avión.
La locomotora
que te arrastra en sueños
a la perdición.
Estoy en tu bolso
con los documentos y el encendedor.
Soy el espejito
que te observa a diario en el ascensor.

Para subir al cielo,
si te hace falta un ángel, para subir al cielo;
para ir al quinto infierno,
si precisás un diablo, para ir al quinto infierno;
que te convierta en fuego,
si te hace falta un mago, que te convierta en fuego;
de todo el universo,
si precisás un guía de todo el universo;
ése soy yo

Soy el perro Pluto
que reclama el hueso de tu compasión.
Soy la perestroika
que exige transparencia en tu ropa interior
Soy la mariposa
que está dibujadaen tu bronceador.
Estoy en tu bolso
con los documentos y el encendedor.
Soy el espejito
que te observa a diario en el ascensor

Para subir al cielo,
si te hace falta un ángel, para subir al cielo;
para ir al quinto infierno,
si precisás un diablo, para ir al quinto infierno;
que te convierta en fuego,
si te hace falta un mago, que te convierta en fuego;
de todo el universo,
si precisás un guía de todo el universo;
ése soy yo

Te conozco ahora - Claudia Isabel Lonfat

a papá


Te conozco ahora
después de intentar reconocerte
cada día, en cada cosa
dentro de éste, nuestro pequeño mundo
Cuando grito tu nombre
y no escucho el suave roce
de tus manos
acariciando la madera
ni el crujir de la tela vieja
de ese saco, que irremediablemente, cuelga triste
sobre el esterillado


Pronuncio tu nombre
muchas veces
todas las veces
y como en un sueño, cada letra
se desvanece en el aire/
se despluma como una paloma
aleteando dentro de una caja


No me escuchás
no me ves
Estás perdido
en extraños paraísos o infiernos.
Yo te veo
te veo en mí
en cada rasgo
cada gesto esquivo
que intento cambiar, pero persiste;
en el perfil
la mirada profunda
la sonrisa franca…


y te conozco ahora
después de seguir los pasos de tu último viaje
el itinerario doloroso
de cada pérdida, cada día
cayéndome en mil abismos
entre voces extrañas
habitantes invisibles
soldados rotos de alguna guerra
cuando se detiene la muerte en tus pupilas
y para reconocerla
tengo que mirar el cielo vidrioso de esos ojos
azules/ angelados
ver como se apagan tus estrellas, una a una
hasta quedarme a oscuras
y en ese dios ajeno,
hallarnos




Tomado del blog: http://www.laperladejanis.blogspot.com/

paisaje cotidiano - Antonio Cruz

Giran los días,
se trastoca cada noche
con la danza ritual de los ensueños,
perpetua nervadura
de la sombra,
paisaje de urgencias cotidianas.
El necesario pan de cada día,
la ropa y el trabajo;
los servicios, el transporte
y tantas otras cosas...
Ni tan siquiera libros.
Los espectros
de alguna guerra oscura
que no está tan lejana,
tal vez una epidemia,
o el hambre de los niños
aquí cerca,
tan solo a cinco cuadras
y si esto no alcanzare
tu cercana lejanía
plagada de nostalgia.
¿Cómo quieres que escriba?
¿Cómo haré poesía de desvelos?
¿Cómo podré transformar en versos
mis demonios?
Decime, por favor,
Decime pronto
¿Cómo podré volver
a mis sagradas escrituras?

Poemas de “POESÍA COTIDIANA” (2006)

martes, 3 de agosto de 2010

Regresaré - Antonio Guerrero

Regresaré y le diré a la vida
he vuelto para ser tu confidente.
De norte a sur le entregaré a la gente
la parte del amor en mí escondida.

Regresaré la alegría desmedida
de quien sabe reír humildemente.
De este a oeste levantaré la frente
con la bondad de siempre prometida.

Por donde pasó el viento, crudo y fuerte,
iré a buscar las hojas del camino
y apagaré sus sueños de tal suerte

que no puedan volar en torbellino.
Cantaré mis canciones al destino
y con mi voz haré temblar la muerte.

Enemigo Intimo - Antonio Gala

Hay tardes en que todo
huele a enebro quemado
y a tierra prometida.
Tardes en que está cerca el mar y se oye
la voz que dice: "Ven".
Pero algo nos retiene todavía
junto a los otros: el amor, el verbo
transitivo, con su pequeña garra
de lobezno o su esperanza apenas.
No ha llegado el momento. La partida
no puede improvisarse, porque sólo
al final de una savia prolongada,
de una pausada sangre,
brota la espiga desde
la simiente enterrada.

En esas largas
tardes en que se toca casi el mar
y su música, un poco
más y nos bastaría
cerrar los ojos para morir. Viene
de abajo la llamada, del lugar
donde se desmorona la apariencia
del fruto y sólo queda su dulzor.
Pero hemos de aguardar
un tiempo aún: más labios, más caricias,
el amor otra vez, la misma, porque
la vida y el amor transcurren juntos
o son quizá una sola
enfermedad mortal.

Hay tardes de domingo en que se sabe
que algo está consumándose entre el cálido
alborozo del mundo,
y en las que recostar sobre la hierba
la cabeza no es más que un tibio ensayo
de la muerte. Y está
bien todo entonces, y se ordena todo,
y una firme alegría nos inunda
de abril seguro. Vuelven
las estrellas el rostro hacia nosotros
para la despedida.

Dispone un hueco exacto
la tierra. Se percibe
el pulso azul del mar. "Esto era aquello".
Con esmero el olvido ha principiado
su menuda tarea...

Y de repente
busca una boca nuestra boca, y unas
manos oprimen nuestras manos y hay
una amorosa voz
que nos dice: "Despierta.
Estoy yo aquí. Levántate". Y vivimos.

Tramiteando - Cuakerboy

Tu recuerdo me asaltó nomás
entorne los ojos. Me vi
explorando con trajecito
Livingstone, perdido en la
espesura de tu leonina cabellera,
luchando para abrirme paso,
saltando de pelo en pelo, hasta
zambullirme y nadar en tus ojos
(cristalinos), para despúes
dejarme devorar por tus abismos
(húmedos).Y estuve así, amniotizado, hasta
que ví mi sueño profanado por un empleado de uniforme que, no muy
amablemente, me notifico que esta prohibido flotar en la cola del banco.

domingo, 1 de agosto de 2010

Casi simple - Martín di Benedetto

se llama un abrir de seis párpados y

¿para qué los caminos para qué el cemento para qué
los milagros las risas los tirantes el estallido del escarmiento?

¿para qué los camiones los honores para qué
las palabras tu silencio el mortuoso andar de las depresiones?

¿para qué el mate para qué las ventanas para qué
los trámites la espera sus hijas andrajosas ansiedades sin tema?

¿para qué la letra, para qué la razón para qué
los miedos, las invenciones las peleas tan cortas que de eternas se enfrían en las fronteras?

¿para qué todo esto para qué lo solemne para qué
el político la angustia el saber el deseo curvo que salva y desgarra aquellos indicios del
alma?

¿para qué?

¿para qué todo esto
hermano
reflejo
para qué al revés sin verdad humano amor tergiversado
alumna infancia madurez trillada?

¿para qué entonces para qué
seguir andando ciego con los ojos abiertos
si es que el canto del pájaro
ya pronto
al tu puerta cruzar?

Estarse sola - Macky Corbalán

mostrar las uñas
sacar la lengua en mofa aguda
lanzar improperios como ácido
al ademán cándido
del que escucha

Hacer ruidos corporales
exhalar efluvios indecorosos
decir amor cuando es muerte
oler a funeraria

estarse sola

para que nadie sospeche
de esta pobre función
sin espectadores
con una pista de arena
repleta de excrementos
y un payaso harapiento
que se mira al espejo
en nuestro retrato

estarse sola
para por fin
ser sola

ser sola
como cuando -apenas nacidas-
miramos el mundo y supimos
que nos habíamos equivocado


Con autorización de la autora: http://pasajeradearena.blogspot.com/

Bagualita del que volvió - Bruno di Benedetto

Quien se ve muerto se consuela.
Paul Eluard

I.
Vengo de estar muerto.
Vengo con todos mis huesos,
mis glándulas de medio existir,
la boca seca, la rodilla rechinante
y todas mis costumbres respiratorias.

Calladito estoy
en un rincón de esta fiesta
a la que nadie me invitó,
en la que nada tengo que bailar
salvo las palabras que rescaté de la muerte.


II.
Es un paisito sin importancia la muerte.
Un paisito redondo
aplastado y blanco.
Uno podría andar agachado
si tuviera donde ir.

Uno se queda entonces
y mira
y no ve
y grita
y se le ahogan los gritos en aceite.

Casi no hay palabras en la muerte.

Cuando uno llega
le hacen dejar la lengua
en una tinaja de sal.

Uno pierde las manos
y también la mala costumbre de esconderse.


III.
No hay disimulos
ni escondrijos,
porque es toda de luz la muerte,
una luz plana como un cuchillo
o una mala caricia.
o un mal desierto al mediodía.

No queda lejos:
limita con toda carne,
con todo gesto.

(Ahí donde usted nace
ahí levanta su frontera
ahí afila su ojo, su instrumento.

Antes de que usted empiece a llorar
ya le dio de mamar su filo,
ya lo entró a acunar con estocadas
ya me lo va durmiendo
con su cuento de arena
y su canción de nada).

Redonda y chata como es,
es infinita la muerte.

de "Escrito en la línea de marea" (inédito)

Grito - Gustavo Tisocco

Nadie grita
como grita el poeta.

Gritar como la madre
del ausente,
como la noche
sobre el mendigo,
como un ave rapaz
devorando a la presa
y como la presa
con su voz de muerte.

Gritar de éxtasis,
también de júbilo
como lo hace
el árbol en primavera,
como un niño
si le cortan el cordón,
como un Dios
cuando le mienten.

Si el poeta no es grito
es un famélico fantasma sobremuriendo.


Con autorización del autor, del libro "Desde todos los costados"